jueves, 19 de marzo de 2009

"...DULCE HERMANA, DULCE DONCELLA SORDOMUDA..." ( POEMA DE GERARDO DIEGO)


Gerardo Diego Cendaya, poeta cántabro y destacado miembro de la Generación del 27 tuvo una hermana sorda: Emilia. A ella, muerta joven, Gerardo le dedicó uno de sus poemas predilectos que termina así:


"¿Acaso ya sabías, dulce hermana,

dulce doncella sordomuda,

que Dios que te selló boca y oídos

para embriagarte de su música,

desataría un día mi trabada

lengua discípula y adulta?

¿Sabías que yo iba a ser poeta?

¿No eres tú, Emilia, quién me apunta?"